
Si hay una serie que no me canso de volver a ver, esa es Paquita Salas.
Una serie gamberra, políticamente incorrecta, irreverente e inteligentísima producida por Netflix y escrita y dirigida por Javier Calvo y Javier Ambrossi (“Los Javis”), que narra las desventuras y ambiciones de Paquita Salas, una representante de artistas -algo chapada a la antigua y demodé para los estándares del postureo ridículo que prima hoy en día- que lucha por que su agencia PS Management siga siendo el hogar y plataforma de artistas 360.
“Los Javis” construyen uno de los personajes más entrañables de la reciente ficción española. Paquita es rotunda, buena persona, generosa, leal, comprometida y apasionada. Es una superviviente, nunca se rinde, siempre lucha hasta el final. Es auténtica y honesta. Brays Efe (el actor que da vida a Paquita) está radiante en un papel que nadie podría haber interpretado mejor que él.
A nuestra protagonista la acompañan en sus peripecias un elenco igual de inolvidables que ella: decenas de actores y personajes públicos míticos de nuestro “star system” haciendo de sí mismos o bien representando a personajes de ficción.
En el segundo grupo destacan Belén Cuesta haciendo de Magüi (la tierna y adorable asistente de Paquita) y Yolanda Ramos haciendo de Noemi Argüelles (posiblemente la community manger y jefa de prensa más “sui géneris” habida sobre la faz de la tierra). Ambas actrices, en estado de gracia, ofrecen interpretaciones desternillantes e inolvidables.
La serie está repleta de escenas memorables con un gran trasfondo de delicadeza y sensibilidad.
Mis cinco escenas favoritas son:
- el trayecto en limusina de Paquita con Macarena García y Cayetana Guillén-Cuervo tras la fiesta de los Goya;
- la despedida entre Paquita y Macarena García en la alfombra roja en La Seminci;
- la conversación entre Paquita y Fernando Canalón tomando unos torreznos en Tarazona;
- la conversación entre Paquita y Charo una noche de duelo en Navarrete (baile de la jota incluido);
- y, finalmente, el monólogo de Anna Allen mirando directo a cámara en el ensayo de la que será la película de su vida.
Y la banda sonora… ¿Qué decir de la banda sonora de la serie? Una cuidadísima selección de canciones en lengua española en cada episodio: La Bienquerida, Miranda!, Loquillo, Camela, Sabina, etc.
Una serie memorable.